Los niños tocan las letras esmeriladas, asociadas a grafemas con la palabra y, gracias a las fichas especiales autocorrectivas, aprenden el alfabeto y pueden distinguir palabras más largas y más cortas. Edad recomendada de 3 a 6 años. Fomenta la destreza manual y la coordinación ojo/mano. Desarrolla el lenguaje y razonamiento. Perfecto para el método Montessori.